Por otro lado, el tiempo de uso es importante. Cuando vayáis a utilizar esta técnica, nuestra recomendación es que aguantéis entre unos 10 y 15 minutos. Después, os lo quitáis y dejáis pasar, al menos, una hora para volver a realizar la terapia. Hacerlo solo una vez, o de forma corta, no dará los mismos resultados, y si se prolonga durante más tiempo del recomendado, puede ocasionar quemaduras, aunque no se aplique directamente sobre la piel.